
Se anunciaba como el Dakar más duro de la historia reciente, un recorrido aún más fuerte de lo habitual que pondría a prueba a los atletas hasta el límite.
No era una exageración. Cuando el rally todoterreno más emblemático del mundo llegó a su ecuador, los pilotos y equipos tuvieron la oportunidad de respirar hondo y repostar para lo que van a ser unas épicas cinco etapas finales en Arabia Saudí.
No menos de siete pilotos respaldados por Monster Energy se alinearon en la línea de salida el 31 de diciembre, y ha habido muchos altibajos después de ocho duras etapas. Esta es la historia hasta ahora...
Ricky Brabec se convirtió en el primer estadounidense en conseguir el oro del Dakar en 2020 y comenzó la carrera con una explosión, llevándose la victoria en la primera etapa para el Honda Rally Team.
Por desgracia, el rally de Ricky terminó antes de tiempo tras sufrir una aparatosa caída en la tercera etapa, en la que los pilotos tuvieron que enfrentarse a arena, barro, rocas y una intensa lluvia en un día brutal. Ricky fue trasladado en helicóptero al hospital, pero tras someterse a algunos exámenes le dieron el visto bueno para regresar al vivac con el equipo y prepararse para volver a casa, sin nada roto.
La cuarta etapa fue menos agitada, ya que la ruta llevó a los corredores de vuelta a través del desierto y a la relativa comodidad de la arena, y eso le vino bien a nuestro hombre Joan Barreda, que cargó hacia la victoria en un Monster Energy uno-dos con Pablo Quintanilla.
La leyenda del Dakar Joan está pilotando una misión en solitario este año como Monster Energy JB Team - respaldado por Honda - y no fue una sorpresa verle de nuevo en lo más alto de la clasificación.
Llegamos a la quinta etapa, con un terreno más exigente, esta vez 374 km de pequeñas dunas con hierba de camello que pusieron a prueba tanto a hombres como a máquinas, pero otro doblete.